Finiquitando peticiones

Un imposible……………..

                                      Poder ver un mundo en paz

Un deseo…………….

                                      Salud

Un sueño……………

                                      Tranquilidad

El dia a día…………..

                                    Abriendo los ojos y viendo cerca las dos personas que amo.

                                    Aprendiendo de ellos.

                                    Disfrutándolos.

                  Sencillamente, terminando un fatídico año y comenzando otro nuevo.

                   

                                   

Cagada de fiestas navideñas

Que éstas fiestas son algo que no acaban de calar en mí, lo saben hasta en los libros. Si a eso se añade el período festivo-circense por el que atraviesa el país, antes que encender velitas en mesitas emperifolladas, prefiero buscar el interruptor de la luz y realizar un "apaga y vámonos".
He salido en varias ocasiones de mi mar para contemplar el paisaje agostado y marchito que ofrecen las calles anunciando que estamos de nuevo en Navidad. No hay ambiente, mucho menos festivo ni alegre, en las caras de las personas que me cruzo al caminar por la ciudad. No soporto a Papa Noel, se lo dejo a mis colegas yanquis y a los Reyes Magos sólo les pido salud para todos en los años venideros por la cuenta que nos tiene.

Se me antoja en dichos itinerarios, engancharme sin querer pero queriendo entre el pobre árbol cargado de insoportables muñecos relucientes y el dichoso portal de Belén recargado de muñequitos que me evocan cada vez más el futuro de ésta sociedad. Tirar del cable que los mantiene y hacerlos desaparecer de la misma forma que han hecho desaparecer nuestro sueldo de Navidad, el trabajo de los compañeros, el derecho a la libertad de expresión y todos los esfuerzos conseguidos durante 35 años.

No me apetecen las cenas, ni las comidas ni las meriendas opulentas con kilos y kilos de sobrantes encima de las horteras mesas navideñas mientras revuelan sobre mi cabeza todas esas familias rozando el umbral de la pobreza. ¿Es Navidad? Pues Feliz para quién aún se lo crea. Para mi corazón y mi cabeza y sin ánimo de ofensas, "cagada de fiestas".

Si los deseos se cumplen alguna vez en estas tierras,
Pido desde mi mar, que todo cambie de rumbo y pueda volver a ver
Una sonrisa, una ilusión y palpe la sensación de tranquilidad
De todos los que un día la tuvieron y desean que vuelva.

No me sale desearos un Feliz Año , pero si os deseo;
Sano y Próspero Año Nuevo.

Receta visceral

Como lo prometido es deuda aquí en mi mar,

les dejo a continuación, ésta receta visceral,

pongan esmero si se atreven con su realización,

pues el moco no es de pavo a la hora de cocinar,

y las medidas de casquería no van a la par,

y para el postre será necesario una buena succión.

Ingredientes a utilizar:

Un corazón partido en cuatro sin aderezar,

extraído solamente en su momento inicial,

cuando la decepción lo parta en dos por la mitad.

Un hígado revenido de bilis a rebosar

por las discusiones mantenidas sin parar.

Un par de riñones un momento antes de miccionar

así la urea da el toque, a éste plato sin igual.

Y mucha sangre líquida, sin coagular

para darle a éste plato su gran estocada final.

Para acompañarlo como postre, tan sólo preparar

con unas manos que se precien dignas de manejar,

subir a punto de nieve la leche extraída del animal,

añadiendo azúcar al gusto de cada paladar.

Yo me puse ayer manos a la obra y tengo que confesar

que los efectos secundarios se hicieron sobrenotar,

en unas cefaleas intensas y difíciles de controlar.

En mi sillón,

con hielo en la cabeza y el corazón, me hallo.

　

No cuela

 

 

Que de pasar frío a pasar calor hay un paso es tan cierto como lo hay del amor al odio. Yo he podido comprobar las dos cosas y otras muy similares en mis propias carnes y quedarme absorta por haber pensado que algo así era mucho más que complicado.....todo lo contrario, casi como dice el refranero, coser y cantar. De igual manera se puede aplicar semejantes dichos, al panorama nacional por el que pasea casi a gatas la sanidad. De lo público a lo privado.....hay un paso......o unos cuántos más?

Que la teoría (que no ley en mi raciocinio por mucho que se empeñe) del señor Darwin tenía parte de razón cuando afirmaba que acabamos adaptándonos al medio para sobrevivir y los que no lo hacían no podrían seguir adelante. Estoy de acuerdo en parte, y creo que me acabo declarando dentro de esa teoría, como una causa de especiación subgéneris y de ese modo es como acabo convirtiéndome en una especie de pensamiento totalmente diferente al que tenía.

En dicho aislamiento es cuando me acabo apercibiendo de que en ese preciso momento, mi alrededor está cambiado, ha comenzado a ser diferente y mis pensamientos acaban por empezar a ir a la par y empezar a dilucidar, que lo que hasta hace bien poco me satisfacía, es ahora lo que comienzo a rechazar.

Igualito que cuando cojo el colador para perfeccionar el caldo y acabo dándome cuenta que se comienza a atascar. Los tropezones por mucho empeño que una ponga , no pasan por los poros del colador, y las semillas y los corazones menos aún si cabe. A partir de ahora, y en consonancia con las absurdas fechas, toca comer sopa visceral. En la próxima entrega, se informará paso a paso de la receta acompañado de algún postre angridulce singular para tragar un poco mejor lo que el colador ya no cuela.

Alive and Kicking

"What you gonna do when things go wrong?
What you gonna do when it all cracks up?
What you gonna do when the love burns down?
What you gonna do when the flames go up?
Who is gonna come and turn the tide?
What’s it gonna take to make a dream survive?
Who’s got the touch to calm the storm inside?
Who’s gonna save you?
Alive and kicking "
                            

                                                                     S. Minds

 

         

               Nunca he sido una persona patriótica, ni siquiera he llegado a sentirme que pertenecía a un barrio, pueblo, ciudad o país. Siempre he sabido amoldarme a cada sitio diferente como el camaleón se adapta al medio, y he conseguido hasta mimetizarme en muchas ocasiones con el lugar hasta llegar a pasar completamente inadvertida.

Pero si hay algo a lo que no soy ni estoy circunscrita es a la situación actual. No comparto ni empatizo con la prepotencia ni con la falta de libertad de expresión, censurando cada momento que está malviviendo esta nuestra sociedad.  No soporto que me intenten acallar lo que pienso o lo que siento.  No consiento que me obliguen a agachar la cabeza, cerrar fuerte los ojos y taponar mis oídos a la fuerza a la vez que me abren la boca para tragarme la amarga cucharada de mentiras confinadas entre mermeladas para que pase mejor. Antes que comulgar con ruedas de molino y tragar con todas las barbaridades acontecidas me apunto al ayuno.

Que los cuidados prestados y a la vez necesarios, requeridos por nuestros pacientes de cada día, se  acabe mermando como si de números se tratase. Que la salud, nuestro pan principal de cada día, acabe siendo moneda de cambio para los intereses de unos pocos, y se acabe convirtiendo en lo primero pero empezando por el final, es algo que me revuelve las entrañas. Me niego y reniego a aceptar formar parte de éste juego, a tratar cada cuidado individualizado de mis pacientes como si fueran objetos en una cinta transportadora y tratar a todo por igual.

Gritaré hasta quedarme afónica y lucharé hasta que ya, extenuados, intenten pisotear nuestra salubridad.

¡¡¡SANIDAD PÚBLICA!!! DE TOD@S Y PARA TOD@S

Absenta indolente

"Absenta... es el afrodisiaco del yo. El hada verde que vive en la absenta quiere tu alma, pero tu estás a salvo conmigo.

Mina, para caminar conmigo, debes morir en tu respirante vida, y renacer en la mia...

Camina conmigo y sé mi amada esposa para siempre".

                              "Drácula, B. Stoker"

En la ausencia es cuando empiezas a dejar que el pensamiento vuele libre y saque todo aquello que no emana en cualquier otra sensación o estado. Es cuando empiezo a darme cuenta de las cosas que realmente importan y de las que nunca debieron tener importancia. Es cuando el cristal de la ventana deja de ser opaco y te deja ver con claridad para quién realmente eres importante y para quién no.

En las distancias cortas es prácticamente imposible ver el todo que me rodea día a día. En las distancias más largas, es cuando se deja caer el esfuerzo por saber, por decir o por querer o en su defecto, cuando se comienzan a ver las pocas ganas de saber, las pocas ganas de decir y las muchas ganas de olvidar por un breve espacio de tiempo. Sensación igual a uno, comunicación igual a cero.

Reina en mi anémona la tranquilidad absoluta mezclada con la ausencia de todo menos lo necesario y lo vital. Jugueteo con mi brújula entre los dedos imaginando el rumbo que tomaré mañana al despertar y me recuerdo a mí misma guardarla a buen recaudo para llegada la noche saber cómo era el camino de vuelta a mi mar. Envuelta entre charlas de media tarde, vinos semidulces-semisecos que se me antojan al paladar cual absenta y carcajadas por doquier.

Perdida en las arcadas dentarias de los demás.

Monólogo de madrugada con mi amiga Soledad.

Flotando entre el encantamiento y la displicencia.